Empezaba el año 1998, estaba expectante, había comenzado a ejercer mi especialización, acababa de abrir mi laboratorio CITOPAT DE LA COSTA y nacía la esperanza de cambiar la vida de mi familia y la mia propia.
La Tia Mati, me había dado en préstamo el carro de Zuly, su hija, mi prima. que no vivía en la ciudad (la única necesidad que tenía mi tía de comprar carro era prestarmelo). Al finalizar la jornada, estando en el carro, quise colocar un CD y caí en cuenta que lo había dejado en el laboratorio. Subí, abrí la puerta, lo tomé y cuando salí había una joven tocando en el consultorio del frente; ya cerraron, le dije, que se te ofrece? me comentó que era citóloga, que recien había terminado su carrera y que estaba interesada en arrendar un consultorio.
En ese momento, el laboratorio trabajaba a pérdida, los clientes eran pocos, le propuse que compartieramos el consultorio y dividieramos los gastos, era una buena propuesta, para ambos; "tengo que decirle a mi Mamá", contestó. Desconocía que en ese momento, acababa de hablar con Geo, la futura Maminal, mi esposa.
A los pocos días me llamó y me dijo que estaba interesada, el trato era sencillo, dividiamos los gastos y cada quien se ocupaba de su trabajo, aportaba los elementos necesarios y administraba su negocio.

Nos fuimos conociendo, yo le llamaba socia y ella me decia socio; posteriormente me haría saber que en ese momento pensaba que era un hombre intrigante, no convencional, que escuchaba noticias en la radio con mucha frecuencia, hablaba muy poco, tenía 34 años, era soltero, ¿no le gustan las mujeres? es muy anticuado? parece amargado; de hecho sus familiares y amigos me llamaban Olafo, el amargado.
Un día le llamé y la invité a salir, bailamos toda la noche en una discoteca llamada "La Caleta" de propiedad de Roque Fiorentino, un colega; Una pequeña botella de Old Parr, nos acompañó y sobrevivió al encuentro. Salimos durante tres años, mientras trabajabamos duro para hacernos conocer, los clientes fueron llegando, los contratos también y el asunto se hizo mas complejo, todos los vectores en juego, apuntaban hacia el centro para formar una sola unidad, bueno casi todo; habia mucho recelo por parte de mi familia y eso complicó las cosas.
Seguíamos trabajando, las cosas mejoraban había comprado mi primer carro, un Daewoo Lanus, color rojo y tenía algunos ahorritos, vivía con Mamá y al lado, mi hermana que se había separado de sus esposo. Estabamos bien, el laboratorio crecía. En el mes de Agosto del 2000, nos enteramos que Julio venía en camino, con mucho temor, pero con gran expectativa, comenzamos a prepara su venida, nos casamos el 7 de Octubre de ese año, comenzamos a construir la que sería nuestra primera casa, a nuestro gusto, donde pudieramos vivir con comodidad, fuimos comprando los elementos necesarios, a nuestro gusto. Todo estaba preparado.
El día 9 de abril del 2001 llegó Julio Cesar....y comenzamos una nueva vida.




Desde que tengo memoria, nunca había visto llover con tanta frecuencia en la ciudad de Santa Marta, durante el mes de Junio, Julio y la primera semana de Agosto, llueve casi todos los días, lluvias ligeras y ocasionalmente torrenciales aguaceros que desbordan rios y quebradas. 




